martes, 10 de diciembre de 2013

Besos...

Me tumbo en la cama, según mi reloj son las 23:00. Cierro los ojos, mientras me acurruco entre mis mantas. Dejo de oír todos los sonidos de mi casa y te veo a ti delante. Toda la oscuridad se torna luz, tú ante mi, y a nuestro alrededor un parque verde y en el cielo un sol radiante.
Puedo suponer que es verano. El olor de tu colonia mezclado con el típico olor de los parques en verano lo inunda todo. Me fijo y veo tus ojos clavados en los míos, de pronto dices mi nombre. "Olalla" pronuncias con tu suave voz y tu tono aniñado y veo esa sonrisa reflejada en tu cara. Me quedo mirando tus labios mientras pronuncias cada palabra que no logro a entender, mientras aguanto esas ganas locas de besarte. Vuelves a pronunciar mi nombre, rompiendo mis pensamientos y obligándome a alzar la vista a tus ojos, que me miran penetrantes, como si pudieran atravesar mi cornea para adentrarse en mis pensamientos. Con un movimiento lento y cuidadoso me apartas un mechón de la cara y dejas tu mano en mi cara. Te acercas más y acabas poniendo tu otra mano en mi cintura, sin quitar tus ojos de los míos de pronto acercas tu cara a la mía, cada vez más, y acercas tus labios a los mios, pegando tu frente a mi frente. Te quedas así en silencio mientras yo escucho el sonido de tu respiración. De pronto me besas. Un beso suave y cálido, en el que noto tu necesidad de hacerlo y sin apartar tus labios de los míos esperas la respuesta. Aprieto mis labios contra los tuyos mientras te rodeo con mis manos en tu nuca. Se nos escapa una sonrisa sin dejar de besarnos. Sin romper ese beso mágico, tan esperado.
De pronto suena algo como una alarma, como si una ambulancia pasara rompiendo nuestro silencio. Poco a poco todo se vuelve distorsionado. Tú vas desapareciendo y una oscuridad se cierna sobre mi. Reacciono y abro los ojos. Apago el despertador. Enciendo la luz y me preparo mentalmente para otro día en el que no te tengo, para otro día en el que tendré que aguantar las ganas de abrazarte, de besarte... Otro día en el que tú y yo no somos nada. Otro día en el que deseo la noche para ser feliz contigo en mis sueños...